Nació en Sonseca a mediados del siglo pasado y sus primeras poesías surgieron durante su adolescencia extremeña, tierra y gentes que él adora. Estudió Periodismo en Madrid, pero su vida profesional recorrió otros caminos, ocupando un gran espacio su militancia sindical mientras residía en Toledo. No llegó a publicar su primer libro, «Solo el Silencio», de poesía hasta hace cinco años, cuando, uno tras otro, muchos de sus mejores amigos se fueron despidiendo de la vida. Un año después, tras la también despedida de su compañera desde la adolescencia, surgió «Ella», igualmente de poesía, en su homenaje.
Las siguientes publicaciones fueron, esencialmente, por el camino de las historias en prosa. Relatos marcados, muchos de ellos, por la fuerza de la ausencia. Así «Pesadilla en Zocodover» y su secuela «Pesadilla en la Puerta del Sol». Y, entre medias, una pequeña vuelta a la poesía con un cuadernillo, «Foreing», monográfico sobre el drama de lo que considera el injusto e inhumano trato a los inmigrantes.
Ahora, ya retirado, vive de vuelta en su pueblo natal. Concretamente en Casabas, la casa donde su abuelo Ricardo tuvo la huerta. Y ha llegado a un pacto con la vida, como le sugirió «el hombre que hablaba con los peces». Solo desea que se cumpla este pacto.
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